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miércoles, 24 de octubre de 2012

Adolescencia aprenda a decir no


Por lo general, nos es difícil enfrentar las proposiciones con una respuesta negativa, ya sea por temor, por miedo a que no nos quieran, por respeto, etc.; o simplemente por considerar que el otro no merece un “no” como respuesta.

Sin embargo, aprender a decir “no” es una tarea posible donde la decisión y voluntad son herramientas fundamentales a la vez que determinan que nos valoramos y estimamos.

Diez técnicas muy útiles:

1.- Diga que “no” a todo lo que cree que la perjudica.

2.- No se deje “extorsionar” ya sea por el grupo, su familia o sus hijos.

3.- Si se encuentra con alguien que la presiona o arremete verbalmente, puede:

Demorar la respuesta sin mostrar señal alguna y decir: “prefiero pensarlo”. Este tiempo para reflexionar le servirá para no responder impulsivamente ni bajo presión y decidir qué es lo mejor para usted.
Ser convincente en los motivos que sostengan su negativa; o sea, hablar en forma firme y sin dejar lugar a dudas.
Ser reiterativo frente al insistente: Utilice el disco rayado. Una vez que dijo que “no” a algo, repita una y otra vez lo mismo diplomáticamente, pero con firmeza.

4.- Aprenda a respetar sus propios deseos. Impóngase ante quienes pretenden que realice actos que no son de su agrado o que entorpecerán su quehacer cotidiano.
5.- Nunca acepte gritos ni malos tratos por pensar diferente.
6.- Aprenda a callar; esto puede ayudar a evitar peleas.
7.- Recuerde siempre que hay situaciones que no tienen retorno. Las agresiones verbales y el maltrato son irremediables. Lo mejor es no llegar a la violencia.
8.- Ensaye la negativa frente al espejo; esto ayuda a descargarse.

9.- No trate de justificarse una vez que lo haya decidido.

10.- Recuerde siempre que decir “no” es un verdadero arte.

Y para finalizar, si después de haber dicho que “no“, usted pierde la amistad, cariño o amor de esa persona, deberá replantearse si realmente esa persona guardaba algún sentimiento hacia usted o tan sólo le venía bien a sus fines; es decir, le era útil.

Fuente : www.mujeractual.com


Los adolescentes y el cigarrillo


Según las estadísticas, la mayoría de fumadores adictos al tabaco empiezan a fumar cuando tienen entre 11 y 14 años.

Muchos adolescentes empiezan a fumar porque lo hacen muchos de sus amigos. En este sentido, es importante enseñar a tu hijo el valor que tiene saber decir que no a ciertas cosas. A pesar de las primeras típicas burlas, sus amigos no van a pensar mal en tu hij@ por el mero hecho de rechazar un cigarillo. Al contrario, aunque no lo digan en voz alta, muchos le tendrán más respeto por su decisión.

Otros adolescentes empiezan a fumar como forma de rebelarse contra sus padres, la escuela o la sociedad en general. La rebelión forma parte de la adolescencia y en cierto modo es inevitable, pero hay cosas que puedes hacer para ayudarle a dejar el tabaco. Por supuesto, tu labor será más fácil si no fumas. De otro modo, lo tienes mucho más difícil.

Explícale las desventajas de fumar. La adolescencia es una época de muchos cambios físicos y de una mayor concienciación sobre su propia aparencia física. Por eso puedes hacer hincapié en las desventajas físicas del consumo de tabaco. Dientes amarillos, mal aliento, ropa que huele mal, mayor probabilidad de desarrollar ataques de acné juvenil, más grasa en el pelo… Además de los efectos más graves sobre la capacidad pulmonar y la salud general de los consumidores.

La adicción al tabaco es difícil de superar para un adulto – por eso existen tantos fumadores – pero mucho más para un adolescente. Síntomas como irritabilidad, tensión, nerviosismo e incluso insomnio pueden influir de forma negativa en su intento de dejar el tabaco. Pero puedes ayudarle. Primero subraya las veces que puedas (sin ser pesado) lo orgulloso que te sientes de él por su esfuerzo. Busca actividades alternativas (sobre todo deportivas al ser posible). Acompáñale a ver a su médico, para preguntar sobre la posibilidad de que su hij@ pueda tomar algún sustitutivo.

No esperes milagros. El mero hecho que un hijo adolescente fumador intente dejar el tabaco y te deja ayudarle, es ya por sí una pequeña victoria. Lo importante es darle ánimos. Si tu adolescente quiere dejar de fumar poco a poco, diseña un plan, limitando el número de cigarillos que consume cada día, y reduciendo el número poco a poco. O ayúdale a imponerse unas normas que hacen que fume menos. Por ejemplo, prohibido fumar dentro de la casa, sólo se puede fumar después de cenar, o prohibido fumar entre semana…

Fuente: Euroresidentes


Nueva moda adolescente


En algunas ocasiones, durante la adolescencia o la pubertad, el deseo de experimentar y alterar los estados de conciencia recurre a prácticas un tanto desesperadas y peligrosas. Un campo de consumo que podríamos designar como “intoxicación chatarra”, que se desprende de una cultura inmadura que celebra el colocarse en estados de extrema estupefacción (lo que se conoce como “getting wasted”).

Ahora vemos un nuevo fenómeno, apenas incipiente, en el que adolescentes estadounidenses empiezan a emplear el gel antibacterial usado para limpiarse las manos para entrar en veloces estados etílicos.

Diferentes medios del estado de California han reportado los casos de algunos adolescentes que están llegando a los hospitales en estados de emergencia por intoxicación alcohólica después de ver estos baratos productos asépticos. El gel antibacterial contiene 62% de alcohol y se dice que los adolescentes están usando sal para separar el alcohol y beberlo (las instrucciones de “destilación” pueden encontrarse en internet). Esta separación equivale a una poderosa bebida del licor más fuerte.

Aunque existen pocos casos hasta ahora, el experto en toxicología del sistema de salud pública, Cyrus Rangan, dijo que podrían las señales de una peligrosa tendencia.


Fuente: Trending blog

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